Tolerancia a la frustración

Ser tolerante a la frustración, dicen los expertos, es saber levantarse de los fracasos. Aceptar que las cosas no salgan como deseamos es difícil. Las personas que tienen alta tolerancia a la frustración son personas perseverantes. Saben aceptar un fracaso y se levantan rápido de él. Los que la Sociedad llama fracasados son muy tolerantes a ella.

Desde que conocí este termino supe que yo tenia eso. No es una enfermedad. Los fracasos se ven como algo normal en la vida. Si uno se cae se levanta. Eso para mi era normal. Si algo no me salía a la primera, lo volvía intentar. Yo aprendí a saber perder. Siempre sostuve que hay que aprender a perder. Creo que me acostumbre a ello.

Me gusta mucho el futbol y cuando perdíamos no me preocupaba. Sí me enojaba, pero no se acababa el mundo. Sabía que habría otra oportunidad. Nunca me consideré un perdedor o un mediocre por eso. Al contrario siempre buscaba ganar y estar entre los mejores. De hecho recuerdo que no me gustaban las competencias pero si me gustaba ganar. Varias veces fui campeón con diferentes equipos de futbol. Aun así, ganar no era una obsesión para mí.

Existen varias anécdotas en mi vida que lo ilustran bien. Cuando me fui de mojado a Estados Unidos y me agarro La Migra en el primer intento, no pensé en regresarme sabía que lo intentaría hasta pasar (luego les cuento esa historia). En pocas palabras la palabra fracaso no me daba miedo.

Reflexioné en todo esto, porque actualmente estoy en una etapa de mi vida en la que he generado mucha frustración y no he sabido manejarla. Más bien a aceptarla. Con el paso de la vida he aprendido a esperar más de ella (de la vida). A tener expectativas grandes. Una de mis características es que tengo mucha fe y perseverancia.

Estos días han resultado cruciales porque estoy a punto de lograr una meta de vida. Un titulo Universitario. Algo que he buscado durante toda mi vida. Las cosas se han complicado un poco. He perdido concentración para lograr resultados en otras áreas de mi vida. Obvio se ha convertido en un Circulo Vicioso. Parece que he perdido la capacidad de ser tolerante a un posible fracaso. No lo sé. Lo que siento es una especie de miedo de fracasar. Sentir que no voy a lograr este objetivo si que me resulta difícil.

Escribo todo esto como una especia de catarsis que me ayude a aclarar mis ideas. Una especie de respiro para seguir. No sé en realidad por qué lo hago. Posiblemente para compartir un sentimiento. Lo que sí sé, es que debo seguir adelante. Soy un convencido de que si en realidad se quiere mucho algo, y se decide pagar un precio por ello, tarde o temprano llegará. No es tiempo de parar. Se vale llorar pero no desistir.